Conducir bajo los efectos del INSOMNIO
Como nación, hemos dado una prioridad muy alta a la conducción sobria, y con razón. Cada año, decenas de miles de personas resultan heridas en accidentes provocados por el alcohol, y se gastan millones y millones en su tratamiento. De hecho, en un artículo escrito por Christopher Ingraham en The Washington Post, se informa que con un nivel de alcohol en sangre, o BAC, de 0,05 (totalmente legal para circular por la calle), las probabilidades de chocar un coche son 100% más altas que las de alguien que no ha bebido. Dicho esto, existe un factor de riesgo que refleja o supera el peligro de conducir un vehículo bajo los efectos del alcohol, según un informe de la Asociación Automovilística de Estados Unidos (AAA).
Según el Dr. Daniel Amen en su libro, El fin de las enfermedades mentales, la AAA informa que los conductores que duermen entre 6 y 7 horas por noche tienen 30% más probabilidades de sufrir un accidente de tráfico que los que duermen más de 7 horas. A partir de aquí, la relación entre la falta de sueño y la probabilidad de sufrir un accidente de tráfico se vuelve una locura. Observa estos números:
- 5-6 horas de sueño = 90% más probabilidades de sufrir un accidente
- 4-5 horas de sueño = 430% más probabilidades de sufrir un accidente
- ¡Menos de 4 horas de sueño = 1,150% más de probabilidades de sufrir un accidente!
Para comparar la conducción sin haber dormido lo suficiente con la conducción bajo los efectos del alcohol, tendrías que tener un nivel de alcohol en sangre de 0,10 (¡ve a la cárcel!) con la conducción después de haber dormido solo 4 o 5 horas la noche anterior. Y si dormiste menos de 4 horas la noche anterior, tienes las mismas probabilidades de sufrir un accidente de tráfico que si hubieras tenido un nivel de alcohol en sangre de 0,15.
El punto principal que hay que sacar de todo esto es asegurarse de dormir lo suficiente. El contexto aquí es en relación con su seguridad al volante, pero dormir lo suficiente también tiene un efecto directo en su salud mental, su metabolismo (lo fácil o difícil que es para su cuerpo quemar grasa corporal), su capacidad para tomar buenas decisiones, tener buenas relaciones y mucho más. Para dormir bien por la noche, pruebe los siguientes consejos:
- Acuéstese a la misma hora todas las noches. Esto ayuda a que su cerebro y su cuerpo adquieran un ritmo natural que indique cuándo es hora de dormir.
- Evite pasar tiempo frente a pantallas al menos una hora antes de acostarse. La luz azul que emiten las pantallas puede afectar negativamente su capacidad natural para dormir.
- No comas durante las dos horas previas a la hora de acostarte. Cuando te acuestes para dormir, tu cuerpo debe concentrarse en descansar, no en digerir y procesar algo que acabas de comer.
- Ten un bloc de notas junto a tu cama. Si te despiertas con la mente ocupada y no puedes volver a dormir, intenta escribir tus pensamientos en un papel para que recuerdes leerlos al día siguiente. Con la tecnología, también puedes usar un dispositivo de grabación en tu teléfono.